Si tomas la píldora no menstrúas
Hacia finales de 2023 realicé una encuesta sobre los temas que más interesaban sobre la salud hormonal femenina a mi comunidad. Mi sorpresa fue la gran cantidad de respuestas repetidas, sobre cómo la píldora anticonceptiva afecta nuestro ciclo menstrual y en realidad, qué implica eso para nuestra salud. Y desde entonces ya pensé en la importancia de un artículo como este donde poder explicarte algo igual no lo sabías: porqué si tomas la píldora no menstrúas.
Y es que la píldora, es un tratamiento hormonal, que hoy en día sigue trayendo controversia.
Por eso antes de comenzar quiero hacer una aclaración: con este artículo no pretendo hacer valoraciones de si es buena o es mala. De si deberías tomarla o dejarla. Cada mujer es responsable de hacer lo que mejor le convenga a su cuerpo, dentro de su propio contexto.
Con este artículo no pretendo hacer valoraciones de si es buena o es mala. De si deberías tomarla o dejarla.
Cada mujer es responsable de hacer lo que mejor le convenga a su cuerpo, dentro de su propio contexto. Porque no es lo mismo tomarla por una endometriosis severa, como anticonceptivo o porque te la han recetado para enmascarar algo que podrías trabajar con cambios en tu alimentación y estilo de vida.
Decir si es buena o mala, pensando que todas somos iguales o que no tenemos criterio propio, es tan simplista que no tendría que estar haciendo esta aclaración.
¿Quieres escuchar el episodio?
La diferencia entre un ciclo menstrual normal y uno artificial
Hablaré de la píldora anticonceptiva de manera general, pero esto también aplica para el anillo vaginal.
La píldora anticonceptiva, forma parte de la historia femenina, en su momento, fue toda una revolución para nuestra libertad. Pero, ¿qué ocurre exactamente en nuestro cuerpo cuando la tomamos?
Empecemos por lo más importante. La píldora anticonceptiva contiene hormonas sintéticas, muy similares al estrógeno y la progesterona que producen nuestros ovarios, que al tomarse en una concentración constante a lo largo de todo el mes consiguen inhibir nuestra ovulación.
Es decir, rompen por completo la fluctuación hormonal natural de nuestro ciclo. Se basan en una premisa: Sin ovulación no hay embarazo.
Evidentemente durante los días en que se toma el placebo o no se toma ninguna píldora, el cuerpo experimenta un descenso brusco de estas hormonas (que es más o menos lo que percibimos en la fase premenstrual pero algo más drástico).
¿Y qué hace el endometrio de nuestro útero cuando percibe ese descenso hormonal? Menstrúa. Sólo que en este caso, no estamos hablando de una menstruación real. Este sangrado es conocido como sangrado por deprivación, y como te decía, es una respuesta de nuestro cuerpo a la ausencia de hormonas durante esa semana. Por eso si tomas la píldora no menstrúas, en realidad tienes un sangrado por deprivación, pero no una menstruación.
El mecanismo de la píldora anticonceptiva fue diseñado para imitar nuestro ciclo natural, pero sin la ovulación.
Los motivos culturales detrás de la píldora anticonceptiva
¿Alguna vez te has preguntado por qué se debe tomar durante tres semanas y descansar (o sustituirla por un placebo) la cuarta semana?
Según la BBC, sus creadores, John Rock y Gregory Pincus, no lo hicieron exactamente por razones médicas, sino más bien por motivos culturales.
John Rock era un católico muy devoto y para él era importante obtener la aprobación del Vaticano. Quería que su sistema anticonceptivo fuera lo más parecido posible al proceso «natural»
Como la Iglesia católica ya había aprobado el sistema de anticoncepción natural (en el que observando el flujo, la temperatura y el calendario, puedes detectar tus días fértiles no para quedarte embarazada sino todo lo contrario, para dejar de tener sexo durante el periodo de ovulación).
Rock pensó que si su método emulaba el ciclo natural podría también lograr el visto bueno del Papa.
La píldora anticonceptiva fue aprobada en 1960 y fue un boom pero la Iglesia tardó casi una década en pronunciarse públicamente, y finalmente cuando lo hizo fue para rechazar este método por considerarlo «artificial».
Para entonces, la preocupación ya no era la Iglesia, sino las mujeres; en la década de los 60, ser dueña de tu fertilidad era todo un hito de empoderamiento en un mundo machista.
Encontré una publicidad de 1964 que decía: «Fácil. Para que tú se lo expliques… y ella lo use».
En la historia de la píldora, han habido debates científicos de si deberían haber descansos para menstruar cada mes o no. Debates en los que por supuesto había muy pocas mujeres (por no decir ninguna).
¿Píldora con o sin menstruación?
Décadas después, salió al mercado la píldora con la que sólo tenías “menstruación” 4 veces al año o aquella con la que ya no hay menstruación nunca jamás (mientras la tomas, obviamente).
Lo cierto es que las mujeres siguen en su mayoría eligiendo la píldora anticonceptiva tradicional que hace “menstruar” cada mes (ya que para nosotras la regla es como un reloj interno. En la antigüedad por ejemplo era una manera de calendarizar los días).
Este sangrado regulado y predecible puede ser visto como un beneficio para muchas mujeres, proporcionando cierta sensación de control sobre cuándo y cómo se experimenta el ciclo menstrual.
Sin embargo, es muy importante que sepamos que este no es un ciclo menstrual natural. Con esto hago referencia a lo que se sigue diciendo comúnmente:, “la píldora regula el ciclo menstrual” y no es así: si tomas la píldora, no menstrúas, ni ovulas. La píldora anticonceptiva desconecta el ciclo menstrual natural y pone en marcha un ciclo menstrual artificial.
La ovulación y las fluctuaciones hormonales naturales están prácticamente ausentes, si esto puede tener un impacto significativo en nuestra salud hormonal o no, no tiene una respuesta sencilla ni para todas. Lo que sí, es cierto es que no regula. Suprime.
Estrés y ciclo hormonal
El estrés puede afectar significativamente nuestro ciclo hormonal. Te sorprenderías de la cantidad de casos de mujeres que tienen desequilibrios menstruales a causa del estrés (desde desajustes, dolor menstrual hasta amenorrea, incluso mientras toman la píldora anticonceptiva). En esta entrada del blog, puedes saber más sobre el estrés, si te interesa el tema.
Nuestros cuerpos son sistemas complejos, influenciados por una variedad de factores externos e internos. Nada es tan sencillo como para tener una respuesta universal, ni como para que una misma solución sirva para todas. Y sin embargo, la píldora anticonceptiva es uno de los medicamentos más recetados. Además, normalmente su uso es muy prolongado.
Te invito a reflexionar:– ¿durante cuánto tiempo has tomado la píldora? ¿Meses? ¿Años? ¿Más de una década? – ¿Llegaste a conocer tu ciclicidad antes de los anticonceptivos? Como venimos diciendo a lo largo de este artículo: si tomas la píldora ni menstrúas ni ovulas por lo que dejar de tomar, supone «arrancar de nuevo tu ciclicidad natural». El tiempo que se han estado tomando los anticonceptivos puede influir en la forma en que el cuerpo responde cuando se decide dejar de tomarlos, por lo que ten paciencia. |
¿Y después de tomar la píldora?
Si después de leer este artículo que titulé: «si tomas la píldora, no menstrúas ni ovulas» y te estás planteando dejar la píldora, debes saber que para algunas mujeres el ciclo puede tardar un tiempo en regularizarse, variando de días a meses, en otras aparece el efecto rebote del acné, en otras de pronto hay cambios en el peso o en la retención de líquidos. O vuelve todo a la normalidad sin ninguna complicación.
Como cada una de nosotras somos diferentes, después de dejar la píldora anticonceptiva necesitamos darle a nuestro cuerpo tiempo y mimo para ajustarse. Sobre todo si has dejado la píldora porque quieres aprender a escuchar tu cuerpo y a regularte de manera natural, o porque estás queriendo quedarte embarazada o simplemente porque estás en otro momento vital y has decidido dejar de tomarla.
Sea cual sea tu caso, quiero decirte que podemos ayudar al cuerpo a ajustarse.
Incluso si aún estás tomando la píldora, lo primero que te recomiendo es que hagas un seguimiento de tu ciclo, y observes los distintos matices: cambios en el estado de ánimo, cambios de apetito, niveles de energía, libido, sueño, como está tu piel, como es tu flujo, qué día viene la menstruación, viene con dolor, sin dolor.
Observar esta serie de aspectos te ayudarán a estar más en sintonía con tu cuerpo y a identificar cualquier cambio o irregularidad que pueda surgir.
Te recuerdo nuevamente que este artículo no busca disuadir el uso de anticonceptivos hormonales, ni mucho menos. Cada una es responsable de sus propias decisiones. Mi intención es que comprendamos juntas cómo funcionan en nuestro cuerpo y qué como cualquier medicamento tomado durante largo tiempo, puede tener un impacto en nuestra salud hormonal.
Lo mejor es estar bien informada y tomar decisiones conscientes sobre tu bienestar. Así que si tomas la píldora, leete bien el prospecto que trae.
Antes de finalizar, te quiero invitar a una pequeña reflexión:
¿Cuánto conoces realmente sobre el ciclo natural de tu cuerpo y las opciones naturales para cuidar de tus hormonas? El primer paso hacia el cambio es la curiosidad y la voluntad de aprender.
Te invito a hacer un viaje hacia el entendimiento profundo de tu cuerpo y tus hormonas, sin la necesidad de intervenciones artificiales.
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